Entre las variadas obras de Pestalozzi, en sus Cartas sobre educación infantil es donde mejor describe sus ideas pedagógicas. Se trata de una obra de síntesis, compuesta en su ancianidad con el propósito de dar una visión ordenada y completa de su pensamiento y de sus experiencias tras una vida entera dedicada a la labor y a la técnica de la escuela.
Índice
Estudio preliminar.
Aptitud de la madre para cumplir con su misión. Primeras manifestaciones del desarrollo del niño. [...]
La superación del memorismo mediante la comprensión y la intuición de las cosas. Enseñemos al niño a entender las cosas y a reflexionar sobre ellas.
El interés del niño por el aprendizaje. [...]
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Sinopsis
Entre las variadas obras de Pestalozzi, en sus Cartas sobre educación infantil es donde mejor describe sus ideas pedagógicas. Se trata de una obra de síntesis, compuesta en su ancianidad con el propósito de dar una visión ordenada y completa de su pensamiento y de sus experiencias tras una vida entera dedicada a la labor y a la técnica de la escuela. El presente libro, pues, constituye el mejor medio para introducirse en el conocimiento directo de Pestalozzi, a través de textos del propio autor. Empieza por insistir en el papel clave que desempeña la madre en la educación básica del niño pequeño, para pasar luego a esbozar un programa de cómo hay que formarlo en los aspectos afectivo, intelectual, corporal, artístico, moral y religioso. Total, un tratado íntegro de pedagogía aplicada a la edad preescolar y a la enseñanza primaria. Se perciben en él tanto la influencia de Rousseau como unas intuiciones renovadoras y progresistas que han hecho de Pestalozzi un hito en la evolución pedagógica.
Colección
Clásicos del Pensamiento
Código
1229631
I.S.B.N.
978-84-309-4419-4
Publicación
14/07/2006
Número de edición
3
Clasificación IBIC
JN
Formato
Papel
Páginas
176
Autor
Johann Heinrich Pestalozzi
JOHANN HEINRICH PESTALOZZI (1746-1827), pedagogo de la Ilustración, protagonizó una renovación educacional inspirada en una mayor plenitud humana, tanto por lo que respecta a la dimensión personal del individuo como a su dimensión social. Sus doctrinas pedagógicas, en efecto, tienden a conseguir un desarrollo integral de la persona y, al propio tiempo, a hacer de ésta un miembro útil para la sociedad: una sociedad más justa, más progresista y más igualitaria que la sociedad de épocas anteriores. Además de teórico, Pestalozzi fue un práctico de la educación, constituyendo un símbolo del maestro entregado vocacionalmente a su noble misión. La aureola que circunda la imagen de este pedagogo suizo proviene sobre todo de su amorosa dedicación a la labor educativa. Pero, más allá de esa calidad humana, formuló unos principios que han contribuido a fundamentar la educación moderna, y que han hecho de él un clásico del pensamiento pedagógico.